El dolor durante las relaciones sexuales vaginales es un problema que se da con bastante frecuencia, sobre todo entre la población femenina. De hecho, es uno de los temas que más preocupan a las mujeres cuando acuden al ginecólogo. El coito doloroso, de persistir en el tiempo, puede afectar seriamente a las relaciones sexuales y resquebrajar la vida en pareja. Pero ¿qué causas hay detrás del sexo con dolor? ¿Tiene solución o tratamiento? La mayor parte de las veces, sí. Desde Arnott Ginecólogos te explicamos por qué ocurre esto y cómo aliviar los síntomas.
Causas principales del dolor durante el sexo
Son numerosas las razones por las que las relaciones sexuales durante el coito pueden causar dolor en la mujer, sobre todo en determinadas circunstancias. A continuación, te exponemos algunas de las más frecuentes:
Vaginismo: ¿Qué es y por qué se produce?
Se trata de una disfunción sexual femenina que produce espasmos involuntarios en los músculos que rodean a la vagina y que imposibilitan la penetración o producen un dolor incapacitante durante el coito. La aparición de este problema puede tener un origen orgánico, bien por existir alguna alteración en las paredes vaginales o por malformaciones genéticas que no permiten consumar el acto sexual. Sin embargo, en ocasiones el vaginismo puede tener una razón psicológica más profunda y que es necesario explorar con un especialista.
Dispareunia femenina: ¿qué es y cuáles son las causas?
Es un trastorno sexual que, a diferencia del caso anterior, sí permite la penetración vaginal. Sin embargo, suele ir acompañado de un dolor más o menos intenso que produce molestias internas e incomodidad durante el sexo. También resulta difícil de diagnosticar. Por ello, lo mejor es acudir a tu ginecólogo para buscar una solución que te haga recuperar cuanto antes el placer en tus relaciones sexuales.
Las infecciones vaginales afectan a las relaciones sexuales
Otro factor clave que explicaría el dolor durante el sexo son las infecciones en la vagina, que pueden aparecer por la proliferación de la cándida albicans, un hongo levaduriforme que reside naturalmente en la vagina o el cuerpo. También por vaginosis bacteriana, causada por un cambio en el equilibrio de las bacterias vaginales, o por tricomoniasis o incluso por falta de estrógenos.
Endometriosis, vaginitis u otras enfermedades
Patologías ginecológicas crónicas como la endometriosis, quistes de ovario, cistitis e incluso inflamaciones pélvicas o de la vagina son otras de las causas de dolor intenso durante el coito. Muchas veces, un simple tratamiento farmacológico puede solucionar o aliviar los síntomas. Otras veces, sin embargo, será necesario operar para eliminar el problema, como en el caso de los quistes ováricos.
Episiotomía
Es una pequeña intervención que se realiza durante el parto y que consiste en una incisión en el periné. Dicho corte sirve para ampliar el canal de salida del bebé. En este caso, se recomienda esperar unas 6 semanas antes de reanudar las relaciones sexuales. De esta forma, la herida quedará bien cicatrizada y la pelvis de la mujer estará totalmente recuperada para disfrutar del sexo de forma plena y sin dolor.
La poca lubricación vaginal puede causar dolores durante el coito
Hay circunstancias en la vida en las que la libido femenina está más baja. También puede ocurrir que la estimulación previa a las relaciones sexuales haya sido insuficiente para alcanzar el nivel de lubricación necesario que permita disfrutar del sexo sin problema. Hay que tener en cuenta que cada mujer es diferente en lo que a gustos y tiempos para llegar a la excitación sexual se refiere. Por eso, a la hora de tener sexo es muy importante dejar las preocupaciones a un lado y dedicar todo el tiempo que sea necesario a hacer disfrutar a tu pareja.
Ciertos medicamentos o tratamientos farmacológicos
Algunos tratamientos antipsicóticos, contra la depresión e incluso ciertos anticonceptivos pueden reducir o bloquear nuestro deseo sexual. Por eso, antes de tomar ningún medicamento se recomienda consultar previamente con nuestro médico o ginecólogo.
Aspectos hormonales
La llegada de la menopausia e incluso la etapa del postparto son momentos en los que se produce una reducción importante de hormonas femeninas, razones por las que el deseo sexual desciende y el flujo vaginal se reduce de forma drástica. Esto provoca sequedad vaginal y en consecuencia molestias durante el coito. Los geles lubricantes son de gran ayuda para acabar con este problema.
Causas psicológicas
Los cuadros postraumáticos causados por abusos sexuales, los prejuicios sobre sexualidad por razones religiosas y culturales demasiado conservadoras, los problemas de pareja, el estrés o la depresión pueden hacer que sintamos dolor y que, por tanto, temamos e incluso rechacemos practicar sexo.
Prevención y tratamiento para evitar los dolores durante el sexo
Para encontrar la solución adecuada a los dolores que a veces nos provocan las relaciones sexuales es fundamental someterse a las pruebas ginecológicas necesarias. En muchas ocasiones, las causas pueden ser puramente psicológicas y estar motivadas, por ejemplo, por el miedo a un embarazo no deseado, a una educación sexual muy restrictiva u otras causas que conviene estudiar.
En estos casos, la prevención a través de la información y la educación sexual es un factor fundamental. Y es en este punto cuando la ayuda de un ginecólogo y un psicólogo especializado en problemas sexuales se vuelve crucial. Ambos mitigarán el dolor durante el coite mediante técnicas como dilatadores, aparatos de potenciación sensorial y geles lubricantes, entre otras soluciones.
Otro aspecto que debemos de tener en cuenta es que cada paciente es un mundo y que tiene sus propias circunstancias. Por ello, hay que estudiar y tratar cada caso de forma individual para conseguir la solución más adecuada.
En ocasiones, basta con fomentar el autoconocimiento sobre nuestro propio cuerpo y practicar ejercicios hipopresivos para relajar y controlar nuestros músculos vaginales. Otras veces será necesario acudir a una terapia sexual de pareja para acabar con nuestros conflictos o aplicar un tratamiento médico, quirúrgico o farmacológico concreto.
Acude a tu ginecólogo para revisar y poner solución a los dolores durante las relaciones sexuales
En cualquier caso, para solucionar cualquier problema, primero habrá que averiguar las causas y acudir a la consulta de un ginecólogo en cuanto sintamos los primeros síntomas. De esta manera, sabremos qué nos pasa y podremos evitar males mayores.